Por: Víctor M. Soto
Espinal Ver.- A consecuencia de la nula vigilancia que ejerce la policía municipal, a cargo del comandante Leonel Pastrana Pérez, quien delega sus deberes en la figura de su hijo apodado el “tigre”, se ha dado en la cabecera y comunidades indígenas, una serie de hechos delictuosos, que van desde el intento de secuestro, robo, asalto y allanamiento de morada, como aconteció en la casa de la señora Nely Suárez.
La afectada Nely Suárez a la policía, dijo que ella se sentía un poco incomoda ya que se encuentra embarazada y esto la llevó a visitar a su doctor, pero grande fue su sorpresa que al retornar del médico, en su casa había un grupo de sujetos, donde solo reconoció a Ismael Juárez quien cuenta con 17 años de edad y tiene su residencia en el municipio de Espinal, además se le señala de ser el jefe de esta banda de delincuentes en esta parte de la sierra totonaca.
Esta situación ha llevado a los agentes a pedir al alcalde Salvador Lammoglia Macip, se lleve el cambio del cuerpo de la policía, porque la mayor parte del personal laboró en la administración del ex-alcalde Pastor Tovar Vázquez, y muchos de ellos quedaron con vicios y su trabajo ha dejado de que hablar.
Prueba de ello que en los antros de vicio de la mala muerte, se suscitan hechos de sangre y hasta zafarranchos, como aconteció al campesino Eustaquio Morales de la comunidad de Santa Catarina, quien fue lesionado de un botellazo en la cantina el “dorado”, la cual se arregló con la policía y sigue funcionando libremente.
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